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Como signatarios del Declaración conjunta de la sociedad civil, Asesores Internacionales de Derechos Humanos se unen a las principales organizaciones de derechos humanos de toda Europa para expresar su honda preocupación por el grave hacinamiento en las cárceles turcas y las violaciones sistemáticas de derechos humanos derivadas de estas condiciones.

La declaración pone de relieve que, según las estadísticas oficiales, el número de reclusos en las cárceles turcas ha aumentado hasta superar los 403.000, superando con creces su capacidad y dando lugar a condiciones inhumanas que violan el Convenio Europeo de Derechos Humanos. A pesar de las sentencias del Tribunal Europeo de Derechos Humanos y del Comité de Derechos Humanos de la ONU, las autoridades turcas siguen aplicando políticas discriminatorias de libertad condicional que excluyen a los presos políticos, como periodistas, abogados, jueces, artistas y defensores de los derechos humanos, encarcelados en virtud de leyes antiterroristas excesivamente amplias (artículo 314 del Código Penal turco).

Los Asesores Internacionales de Derechos Humanos apoyan la petición de reformas urgentes y no discriminatorias y la liberación inmediata de los presos vulnerables, incluidos los ancianos, los enfermos, los discapacitados y los que tienen hijos pequeños. Hacemos hincapié en que cualquier respuesta legislativa al hacinamiento en las cárceles debe cumplir las obligaciones internacionales en materia de derechos humanos y el principio de igualdad ante la ley.

International Human Rights Advisors mantiene su compromiso de abogar por la protección de los derechos fundamentales y el Estado de derecho, y de solidarizarse con las personas detenidas injustamente por ejercer sus libertades.

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